lunes, 20 de diciembre de 2010

Mil detalles.

En la televisión han anunciado chubascos y cielos bravos, anuncian frío, calles vacías y solitarias.
Sin embargo, hace unos días -quizás semanas o meses- el sol amaneció junto a una caliente brisa, y entonces abrí los ojos.
Me asomé por la ventana. El cielo parecía consumirme con su claridad, nunca lo había imaginado de un azul tan bello.
El sol comenzaba a iluminarme poco a poco, cada vez con más intensidad. Me sentía libre, segura, feliz.
Desde aquel día, ni una gota de lluvia volvió a caer sobre mí. No vi chubascos ni cielos bravos, tampoco sentí frío y la gente no dejó de pasear por las calles del pueblo.
En todo este tiempo he estado contemplando cada detalle de la vida. Cada uno de ellos es bello por sí mismo.
Al parecer el hombre del tiempo se ha equivocado. Por lo menos en mi mundo, sí.



 A veces todo en la vida tiene su sitio, todo encaja. Y te sientes feliz.

1 comentario:

  1. tienes un blog monísimo guapi, me encanta el texto! te sigo desde ya, muakks!

    ResponderEliminar